martes, 3 de febrero de 2009

El pasaje sin nombre


El nombre de este pasaje se perdió entre los papeles de un loteo lejano y los habitantes lo llaman simplemente " el pasaje sin nombre" o "el de las escaleras". Lo cierto es que esta pequeña calleja conduce hacia el pequeño restaurante "el Galeón" donde las almas en pena se regocijan con las empanaditas de mariscos a toda hora. El pasaje ya mentado permite observar la playa tranquilamente puesto que ningún vehículo puede utilizarlo como la foto lo indica. Los vecinos que allí habitan son conocidos en el pueblo por su hospitalidad sencilla y fraternal. Llegada la noche, el lugar ofrece uno de los mejores puntos de vista del litoral cuando estrellas y luces de la localidad se enlazan ofreciéndonos centellos y resplandores matizados de rumores del oleaje que termina por dormirse en la playa.

Y Quidico fue...


Esta es una de las imágenes más antiguas que se conoce del pueblo, en la década de los 50 cuando era la época del "Machascaras" y un camino de tierra se aventuraba hasta la caleta. El trigo ondulaba en las colinas, era el verano y algunos veraneantes (que en aquél entonces se llamaban "visitas")llegan hasta este fin del mundo. El terremoto del 60 no había pasado, ni la copa del mundo del 62, ni habían aparecido los Beatles, ni siquiera el hombre había llegado a la luna... pero se llegaba ya hasta Quidico.